Que el Yoga es beneficioso para aliviar las tensiones, reducir el estrés y conseguir la paz interior es algo a lo que nos hemos referido en más de un artículo de esta sección. El Yoga nos sirve para vivir con una mayor conciencia de nuestros actos, para mejorar nuestras relaciones con los demás y para mejorar la inmunidad de nuestro organismo. También para mejorar nuestra capacidad intuitiva, nuestra flexibilidad y nuestra actitud postural. A todo ello, repetimos, hemos hecho referencia en alguna que otra ocasión.
En este artículo nos toca hacer hincapié en uno de los beneficios quizás menos valorados de todos los que se asocian a la práctica del Yoga: el de perder peso. Después de todo, una postura de Yoga o una asana sirve para tonificar los músculos, lo que permite lucir una imagen más tonificada. Por otro lado, los ejercicios de respiración que siempre van asociados al Yoga mejoran el aporte de oxígeno a las células y, con ello, optimizan el funcionamiento de nuestro organismo. Un tercer factor de la práctica del Yoga que revierte de manera positiva en la pérdida de peso es el reforzamiento de nuestra psique. Reforzada ésta, controlaremos mejor (y con menos ansiedad) nuestras ganas de comer.
Atendiendo a todo lo dicho anteriormente debemos reseñar que toda persona puede adelgazar practicando Yoga. Para eso, sin embargo, hay que cumplir una premisa: saber qué asanas o posturas de Yoga debemos realizar para conseguir dicho objetivo.
Veamos a continuación algunas de las más interesantes y efectivas posturas de Yoga para adelgazar.
Postura del pez
Para practicar esta postura de Yoga para adelgazar hay que tumbarse en el suelo, con las piernas extendidas y los brazos arqueados. Colocados así, hay que tocarse las nalgas con las palmas de la mano.
Al presionar con las manos contra el suelo elevaremos los hombros y arquearemos el pecho hacia arriba. Al colocarnos así estiraremos el cuello y la cabeza hacia atrás hasta tocar con ella en el suelo.
La clave de esta postura de Yoga para adelgazar radica en elevar el torso y empujar hacia arriba con el esternón hasta conseguir que se forme un arco que vaya desde el pubis hasta la garganta. Mientras se practica, las piernas, extendidas y juntas, deben presionarse la una a la otra por la parte interna de las mismas.
Postura de la cobra
Esta postura de Yoga para adelgazar es, probablemente, una de las posturas de Yoga más populares. Para practicarla hay que tumbarse boca abajo, con las palmas de las manos bajo los hombros y los dedos apuntando hacia delante.
Tras soltar el aire de manera relajada un par de veces, estira el cuerpo y, presionando con el hueso púbico y con la punta de los pies contra el suelo, sube el pecho mientras coges aire. Al subir el pecho no debes presionar con las palmas de las manos. Realiza este movimiento durante varias respiraciones.
Una vez realizados estos movimientos sírvete de las manos para, presionando contra el suelo, curvar la columna y levantar el tronco. Una vez conseguida la postura hay que realizar varias respiraciones hondas.
Para realizar correctamente esta postura de Yoga para adelgazar hay que alargar la columna (estirándose al máximo posible) cuando se suelte el aire.
Postura de la vela
Antes de detallar los pasos a seguir para realizar esta postura de Yoga para adelgazar vamos a realizar una recomendación dirigida a todas aquellas personas que se estén iniciando en la práctica del Yoga. Dicha recomendación hace referencia a la colocación de algo acolchado debajo del cuello. Con ello evitaremos que esa zona tan delicada de nuestra anatomía pueda cargarse más de la cuenta.
Colocado el acolchado hay que colocarse boca arriba, con la parte posterior de la cabeza y la parte superior de los hombros reposando sobre el suelo. Una vez colocados así hay que levantar las rodillas flexionadas hacia arriba.
Tras esto hay que contraer las abdominales al mismo tiempo que se suben las rodillas flexionadas hasta que queden por encima de la cabeza.
Hecho esto, hay que estirar las piernas para que vayan a tocar el suelo por detrás de la cabeza. Para realizar este movimiento podemos extender los brazos sobre el suelo para conseguir un mayor equilibrio.
Para realizar correctamente este ejercicio de Yoga para perder peso debemos tener en cuenta dos factores. El primero es que nuestra barbilla debe tocar nuestro pecho cuando estamos realizando la postura. El segundo es que hay que conseguir que el peso recaiga sobre los hombros y no sobre las cervicales. De hecho, el cuello debe permanecer relajado mientras realizamos la postura.
Tras varias respiraciones, las piernas deben bajar de manera suave y controlada.
Junto a estas tres posturas de Yoga para adelgazar podemos encontrar una a la que ya dedicamos un artículo en especial hace algunas semanas. Dicha postura es la archiconocida asana del saludo al sol. Esta asana está considerada una de las asanas más completas de la práctica del Yoga.