Los amantes de los deportes de aventura que viajen a India tienen un destino ineludible: Manali. Ubicada en el extremo norte del valle del Kullu, en el estado de Himachal Pradesh, y como cabeza de aquél, Manali, considerada durante mucho tiempo el “fin del mundo habitable”, es uno de esos lugares que, debido a su ubicación, ofrece encantos tanto en verano como en invierno. En los meses de calor, Manali es un popular destino turístico para los propios indios. En los de frío, un lugar que, cubierto de nieve (se halla a 2.050 metros de altitud), adquiere un aspecto casi mágico.

En verano se puede disfrutar de la impresionante visión de un sinfín de glaciares casi derretidos que llenan de agua las laderas de las montañas, cubriéndolas de arroyos que van a verter su agua al cauce del río Beas , que, en el centro del valle dominado por Manali, corre con un caudal inmenso y potente.

Viajar y desplazarse por Manali

Para viajar a Manali lo más habitual es optar por el autobús (hay conexiones con Dehli, Dharamsala o Leh, entre otras ciudades). El aeropuerto más cercano es el aeropuerto de Bhuntar (Kullu), que está situado a 50 km de Manali. Para viajar desde el aeropuerto a Manali suelen utilizarse taxis prepagados.

La estaciones de ferrocarril más cercana a Manali, Ambala Cantt, se halla a 200 km. Desde allí, el viaje en autobús hasta Manali dura unas 10 horas.

Una vez en Manali, el turista puede moverse en bicicleta o moto de alquiler o en taxis que se alquilan por día para, de ese modo, poder visitar los alrededores de Manali. El transporte público en la zona no es demasiado bueno (la frecuencia de paso es muy baja), pero sí que es mucho más barato que las opciones del alquiler.

Encantos de Manali

Entre los encantos de Manali de obligada visita podemos encontrar:

  • Rohtang Pass. Ubicado a 3.979 metros de altitud sobre el nivel del mar, Rohtang Pass es el punto más alto de la carretera que comunica Manali y Keylong. Desde este punto se puede disfrutar de una espectacular panorámica de montañas que se enseñorean por encima de las nubes. Cerrado el camino en invierno, en verano es un lugar extremadamente fresco.
  • Cerca de Rohtang Pass podemos encontrar Beas Kund, la fuente del río Beas. En Beas Kund existe un templo en forma de iglú.
  • Templo de Hidimba Devi. Este templo, consagrado a la diosa Hidimba (o Hirma) Devi, está construido sobre una enorme roca y está rodeado por un bosque de cedros. La estructura del templo Hidimba Devi de Manali fue construida en 1553. El templo de Hidimba Devi (o de Hadimba Devi) presenta las características formales tradicionales de las pagodas de Himachal Pradesh. La base de dichos templos solía construirse con shikhara, una piedra de la zona, y los mismos solían ser rodeados con adornos de piedra o amalakas. Sobre dicha base se elevaba la cubierta, formada por varios volúmenes que tradicionalmente se cubrían con tejas de deodar (cedro del Himalaya) y que ahora se acostumbran a cubrir con pizarra. Actualmente, la base de piedra inferior del templo de Hidimba Devi ya no existe. En la actualidad, la estructura tiene una altura de 20,50 m de alto. La decoración de este templo es una decoración muy rica y variada. Aparecen representados motivos del folclore, la tradición y la religión hindú; animales como elefantes, leones o leopardos, todos ellos tallados sobre la madera.
  • Aguas termales y templo de Vashist. A unos 3 km de Manali y siguiendo el curso del río Beas podemos encontrar Vashist. Vashist es un pequeño pueblo plagado de manantiales de azufre natural, casas de baño, balnearios, etc. El agua caliente que circula por las cañerías de estos balnearios posee grandes propiedades medicinales, lo que la convierte en una especie de Karlovy Vary de la India. En Vashist puedes contemplar también dos grandes templos de piedra que, colocados el uno frente al otro, engrandecen la visión de la plaza principal de esta localidad tan cercana a Manali. Adornado con múltiples tallas de madera, el menor de ambos templos está consagrado a la patrona de la ciudad. De entre todas esas tallas destacan principalmente las que, ubicadas en el interior del templo, presentan un aspecto ennegrecido debido al humo de las lámparas de aceite y al humo del incienso.
  • Valle de Solang. Al valle de Solang se le llama popularmente Punto de Nieve. Ubicado al noroeste de Manali, este valle es un lugar privilegiado para practicar el esquí. Desde este valle pueden contemplarse maravillosas vistas de las montañas cubiertas de nieve y de sus glaciares. Las laderas de este valle son un lugar muy buscado por los amantes del parapente.
  • Cascadas Rahala. Subiendo hacia Rohtang Pass, a unos 16 km de Manali y a una altitud de 2.501 metros, se encuentran las bellas cataratas de Rahala que son, en verdad, tres cascadas. A dos de ellas se puede acceder a pie por un camino, eso sí, algo arriesgado y sólo apto para quien no padezca de vértigo. Un poco más arriba de las cascadas Rahala pueden encontrarse, también, las cataratas Rozy.
  • En Manali y sus alrededores pueden encontrarse también una gran cantidad de gompas brillantes. Estos tradicionales monasterios budistas se mantienen con donaciones realizadas por las comunidades locales y con la venta alfombras de lana que se tejen a mano en el taller del templo.
  • Old Manali. Situado a unos 3 km al noroeste de Manali podemos encontrar Old Manali (es decir: el Viejo Manali). Esta zona es famosa por sus tiendas, sus casas de huéspedes y sus huertos.

Los amantes de los deportes de aventura pueden practicar en Manali deportes tan variados como alpinismo, esquí, senderismo, parapente, trekking, rafting, kayak (el río Beas es un lugar ideal para practicar kayak) o ciclismo de montaña.