Estás decidido o decidida a practicar Yoga pero tienes algo claro: lo quieres hacer de la manera más cómoda posible y sin tener que desplazarte para practicarlo a ningún centro, gimnasio, etc. Es decir: quieres practicar Yoga en tu casa.

Para practicar Yoga en casa debes, ante todo, marcarte una pauta. El mantenimiento de una rutina es, en el Yoga, fundamental a la hora de obtener de él sus máximos beneficios. En este artículo queremos darte una serie de consejos para que puedas establecer una rutina a la hora de practicar Yoga en casa.

El primer consejo, fundamental, es que busques un espacio ideal en el que, dentro de tu casa, practicar Yoga. Ese espacio ideal para practicar Yoga en casa debe ser un espacio limpio, sin muebles, un lugar que pueda ser decorado con imágenes que, de alguna manera, te ayuden a encontrar esa sensación de relajación y paz que buscas a través de la práctica del Yoga.

El segundo consejo se basa en la recomendación de comprar una serie de utensilios que deben servirte para realizar tu práctica de Yoga en casa. ¿Qué utensilios o complementos son esos? Una esterilla de Yoga, una manta de Yoga y alguna almohada o cojín de meditación te ayudarán a practicar Yoga. Debes tener en cuenta que ninguno de esos complementos debe resultar caro de por sí.

Una de las notables diferencias existentes entre la práctica de Yoga en casa y la práctica de Yoga en alguna academia, gimnasio, etc. es que en estos últimos lugares siempre se puede contar con el asesoramiento de algún maestro yogui o alguna persona lo suficientemente experimentada como para orientarnos sobre cómo realizar correctamente las diferentes asanas, prácticas, etc. En casa no disponemos de dicha orientación, por lo que somos, en última instancia, los únicos responsables de la elección de asanas y modo de realizarlos. Es decir: que tenemos que realizar la práctica de Yoga extremando nuestras medidas de seguridad de cara a evitar, en la medida de lo posible, la posibilidad de sufrir algún tipo de lesión. Una superficie blanda o una alfombra gruesa dificultan el equilibrio y, por tanto, aumentan la posibilidad de que existan lesiones.

Una vez dispuestos todos los elementos físicos necesarios para la práctica del Yoga, hay que elegir qué estilo de Yoga es el más idóneo para practicar Yoga en casa. Esto, más que de las peculiaridades propias de practicar Yoga en casa, depende más bien de tus gustos. Si deseas incorporar dinamismo y meditación a tu práctica seguramente optarás por el Kundalini Yoga. Si, por el contrario, lo que prefieres es aprender la mecánica de un tipo determinado de postura, el Yoga Yynegar o el Yoga Kripalu (estilos propios del Hatha Yoga) pueden ser dos estilos de Yoga muy apropiados para ti.

Escogida una forma de Yoga, y antes de iniciar tu práctica en solitario en casa, sería muy recomendable que, durante un tiempo, acudieras a algún centro en el que pudieras aprender la correcta realización de las diferentes asanas. Ningún manual escrito u on line reemplazará la inestimable ayuda de un profesor de carne y hueso que, de manera presencial, corrija los errores que puedas cometer al iniciarte en la práctica del Yoga. Adquiridas esas nociones básicas de la mano de un maestro presencial, entonces sí podrás ampliar tus conocimientos sobre Yoga recurriendo a manuales, sitios web y algunas aplicaciones que pueden servirte para ampliar esos conocimientos.

Cuando, por fin, te decidas a practicar Yoga en casa, hazlo de manera suave y teniendo claro cuánto tiempo te reservas a ti mismo. Respetar al propio cuerpo lo mismo que a la disciplina es fundamental para que éste vaya, poco a poco, adaptándose a las exigencias de la práctica del Yoga.

La práctica de Yoga en casa debe culminar siempre con un tiempo dedicado a la meditación. Nada mejor que el espacio propio y conocido como para abandonarse al estado meditativo y para descubrir el propio yo. Una ayuda a esa práctica meditativa puede ser la de la elección de alguna música que, relajante e inspiradora, nos permita aislarnos de todo lo que no tenga que ver con nuestro yo y nuestras sensaciones. La meditación es fundamental para que fortalezcas tu carácter, tu mente, y crezcas como persona. Para meditar puedes utilizar técnicas de concentración en la meditación o, si crees que puede resultarte más provechoso, en el uso de mantras o en técnicas de visualización. Escojas la técnica de meditación que escojas, sin duda te permitirá, a poco que le dediques algo de tiempo, extraer los máximos beneficios de la práctica del Yoga en casa.